El calabacín es una verdura que se ha hecho muy popular en
los últimos años, ya que es sabrosa, nutritiva y baja en calorías. Su uso
culinario es amplio y variado: rellenos, en tempura, en tortilla, asados ¡y
mucho más! Entonces… ¿por qué no cultivar tus propios calabacines en tu huerto
en casa?
Historia
Proveniente de la familia de las Cucurbitáceas, el calabacín
(o Cucurbita pepo) se cultiva desde hace muchísimos años y su cosecha se ha
extendido por zonas templadas como Egipto, Grecia o Italia. Los árabes fueron
los pioneros en el cultivo y producción de esta verdura por las regiones más
occidentales del Mar Mediterráneo, resultando un alimento muy usado por las
clases medias y bajas durante la Edad Media. En la actualidad los principales
productores mundiales de esta verdura son Holanda, América del Norte,
Marruecos, Italia y España (Murcia).
La siembra
El calabacín es un cultivo que necesita un clima cálido para
germinar. Para cultivar el calabacín en tu huerto en casa, puedes hacer la
siembra directamente en tierra o en una capa de arena, a razón de 2-3 semillas
por hoyo, a una profundidad de 2 cm. Las semillas se siembran juntas porque el
objetivo es que al emerger rompan la costra del suelo con mayor facilidad. Una
vez colocadas, hay que cubrirlas con 3-4 cm. de tierra o arena según
corresponda.
Una vez que se haya producido la germinación, se recomienda
dejar crecer sólo un plantín por hoyo. Para ello se debe elegir la más fuerte y
descartar las otras. La época de siembra es de marzo a septiembre.
El suelo
El calabacín es muy poco exigente con el suelo y se adapta
con facilidad a todo tipo, aunque prefiere aquellos profundos y bien drenados.
En cuanto a los fertilizantes, los abonos simples son los que más se utilizan,
tanto solubles como en forma líquida.
El riego
Si piensas cultivar calabacín en tu huerto urbano, debes
saber que el calabacín es una planta exigente en humedad, que precisa riegos
más frecuentes con la aparición de los primeros frutos ¡sólo hay que ver su
composición! No obstante, al principio de la siembra no son convenientes los
excesos de agua, ya que los encharcamientos son perjudiciales para el buen
desarrollo de la planta.
Al realizar el trasplante, se debe hacer un riego profundo
para afianzar las raíces y no se debe volver a regar la planta hasta que las
hojas se vean como “alicaídos”; ahí se realizará nuevamente un riego profundo.
Éstos pasos deben repetirse hasta que comience a crecer la flor. A partir de
allí, el suelo se mantendrá húmedo pero sin excesos de agua.
Plagas y enfermedades
¿Cuáles son las plagas y enfermedades que afectan
principalmente a la hora de cultivar calabacín en tu huero en casa? Veamos:
Araña roja: estos insectos afectan gravemente a la planta
durante su primera fase de desarrollo, por ello se recomienda vigilar la planta
en esta instancia.
Mosca blanca: este insecto produce el amarillamiento y
debilitamiento de la planta. La forma de combatir esta plaga puede ser cultivar
plantas aromáticas repelentes como la albahaca.
Pulgones: el peligro de los pulgones reside en que forman
colonias y se distribuyen en focos que se dispersan principalmente en primavera
y otoño.
Otras plagas y enfermedades:
Trips
Nematodos
Minadores de hojas
¿Sabías que…? Si plantas el calabacín junto a la capuchina,
alejará a los pulgones y a las chinches, y mejorará su sabor; es una planta muy
beneficiosa para este cultivo. También la puedes plantar junto al Tagete, una
planta ornamental, útil para evitar nematodos.
La poda
En el calabacín no se realiza la poda de formación, por lo
cual la poda se ve reducida a la limpieza de brotes secundarios que deben ser
eliminados cuanto antes.
La cosecha
Si tu huerto urbano ha dado una buena acogida al calabacín,
la recolección del calabacín se hará 40 días después de la siembra, y
continuará de acuerdo al crecimiento de la planta, por otros 40-60 días más.
Se aconseja recolectar los calabacines todos los días o cada
dos días como máximo, ya que hasta que no se corta el fruto está creciendo, y
retrasa la formación de los frutos siguientes.
Cuidados imprescindibles
¿Convencido de cultivar calabacín? Pues ahí van algunos
consejos:
– Es una planta que necesita bastante luz, por lo que es
conveniente plantarla en un lugar soleado para aumentar la cosecha.
– Su óptimo desarrollo se produce cuando las temperaturas
oscilan entre los 25 y los 35° C.
– Debes siempre sacar las malas hierbas y eliminar restos de
cultivo, sobre todo para evitar plagas y enfermedades.
– Las flores del calabacín se desprenden solas una vez
completada su función y se pudren con facilidad. Esto puede suponer una fuente
de enfermedades, por lo que debes eliminarlas cuanto antes.
Ficha Didáctica
Si tienes un huerto que puede ser visitado por niños y adultos, puedes imprimir la siguiente ficha didáctica y colocarla junto a la planta, de esta forma el huerto tendrá un aspecto mucho más atractivo; y los visitantes podrán conocer muchas más cosas de cada tipo de planta.
Esta ficha incorpora un código QR que al ser escaneado por un teléfono movil, les conducirá directamente a la Ficha Web.
Esperamos que os guste :)
Fuente: ecohortum.com